Si te ha sobrado un poco de tela de algún otro proyecto y te gustó la tela por su suavidad y diseño puedes aprovecharla para hacer un conejito muy blandito para tu bebé o tu pequeño. Es muy fácil y seguro que le gustará. Y necesitarás pocos elementos más aparte de la tela, un poco de relleno y en una tarde lo tienes listo.
Vamos pues a ver cómo puedes crear este sencillo peluche que resulta de lo más adecuado para un niño pequeño. Sólo tela y relleno, sin piezas que se puedan soltar y producir algún accidente.
Materiales:
- Medio metro de tela
- Un trozo de tela de color diferente para las orejas
- Tijeras para tela
- Tijeras para papel
- Guata
- Alfileres
- Hilo
- Aguja e hilo de bordar
- Plantilla
Imprime en primer lugar la imagen de arriba al tamaño que quieras. Recorta las distintas partes y úsalas como plantilla para recortar la tela que vas a necesitar.
Una vez tengas las piezas de tela recortadas ya puedes comenzar a montar el peluche.
Comienza por las extremidades, une las dos piezas que forman cada brazo y cada pierna y únelas con unos alfileres.
Cose los bordes con la máquina de coser o a mano si no dispones de ella. Dale la vuelta a cada extremidad.
Introduce poco a poco la guata dentro de cada una de las extremidades para que tomen cuerpo. Un palillo o un lápiz te irán bien para ayudarte a introducir la guata hasta el fondo.
Realiza las operaciones anteriores con las piezas destinadas a las orejas. En este caso usarás una pieza de tela estampada y otra de tela lisa para formar el interior de la misma.
Une los extremos de la parte inferior de las orejas del conejo y cóselas para que adopten la forma que puedes ver en la foto superior.
Une las distintas piezas del conejo con alfileres. Cose las orejas y las piernas. Éstas las coseremos sólo sobre la cara delantera del tronco dejando la parte trasera abierta para poder colocar el relleno.
A continuación haz lo mismo con los brazos. Primero fíjalos con alfileres y después cóselos con aguja e hilo.
Dale la vuelta y rellena el cuerpo del conejito con la guata. Una vez más el lápiz no irá nada mal para distribuir la guata por el cuerpo del peluche. Cosemos la parte inferior del tronco para que no se nos escape el relleno.
Finalmente remata el peluche bordando los ojos, la nariz y la boca con hilo de bordar, así el conejito tendrá la cara que le falta. Tendremos listo el conejito para que nuestro pequeño lo adopte como su peluche favorito.
Vía: crafts.tutsplus.com