Construir un lapicero con espejos es una tarea relativamente fácil, aunque delicada, pero con un resultado único, espectacular. Un precioso objeto DIY que encantará a niños y a mayores y que podréis usar tanto en casa como en el cole o la oficina. ¿Queréis saber cómo hacerlo?
Materiales para esta idea:
- Dos espejos de mano formato cuadrado o rectangular.
- Toalla de manos.
- Martillo.
- Lapicero o envase de plástico formato rectangular.
- Pistola de pegamento.
- Guantes de protección (opcional).
Comenzamos extendiendo una toalla de manos sobre una superficie grande, una mesa de trabajo o de estudio. Sobre esta toalla colocaremos un espejo y lo cubriremos. Tenéis que romperlo en fragmentos de tamaño medio, golpeando ligeramente con el martillo hasta que las piezas se suelten. Os recomendamos que uséis guantes durante esta operación para evitar cortaros, ya que las piezas rotas del espejo pueden contener esquirlas y hacer heridas.
Una vez tenemos las piezas, comprobamos que se hayan roto del todo. Si no fuese así, habría que volver a usar el martillo con un poco más de fuerza.
Usamos la pistola de pegamento para pegar los trozos de espejo sobre cada cara de nuestro lapicero de plástico. Pegadlas a vuestro gusto, usando todos los trozos que queráis y desechando aquellos que no sirvan.
Dejamos secar el lapicero y comprobamos que las piezas estén debidamente sujetas. Ya podemos disfrutar de un precioso objeto de diseño hecho con nuestros propias manos.
Vía: buzzfeed.com