Cuando he visto estos candeleros he pensado en una tarde de fin de semana de otoño, la lluvia y el frío viento nos impulsan a quedarnos en casa resguardados haciendo alguna tarea entretenida. Y por qué no hacer estos sencillos y agradables candeleros. Luego nos servirán para iluminar la casa con la tenue luz de las velas en las oscuras tardes que se avecinan. Además nos pueden servir para acabar ese poco de cemento que siempre se queda olvidado en el saco, sobrante de la última pequeña reforma que emprendimos.
Sólo necesitamos materiales que de seguro tenemos por casa o en el fondo del trastero o del garaje.
Materiales:
- Cemento o mortero preparado.
- Agua.
- Un molde bonito que nos guste.
- Plástico.
- Velas pequeñas.
Es tremendamente fácil, no hay mucho que explicar. Pondremos un trozo de plástico en el molde que vayamos a usar así ni lo ensuciamos y además nos facilitará la tarea de desmoldar.
Vertemos la mezcla en el molde forrado y colocamos en el centro una vela de té para hacer el agujero central donde luego irán las velas, dejamos secar, a las pocas horas estará listo para desmoldar, si se trata de cemento. Si lo hacemos con yeso, que también se puede usar, mucho antes.
Tras el desmoldado quitaremos cualquier resto de plástico que haya podido quedarse pegado y dejaremos en lugar seco para que acaben de secarse. En 48 horas, si es cemento lo que hemos usado, estará curado. El yeso bastante antes, unas pocas horas serán suficientes.
Ya tenemos listos nuestros candeleros para que sujeten las velas. Fácil y muy decorativo, en el jardín o la terraza quedarán geniales. Pero también dentro de casa serán un buen elemento decorativo sobre todo ahora que se lleva tanto el hormigón en decoración de interiores.
1 comentario
lindas ideas ami me gustan estas curiosidades grasia