Pulsera de macramé y tuercas

La bisutería realizada con tuercas, arandelas y demás productos de ferretería se están poniendo de moda. Inspirado tal vez por la importancia que está adquiriendo el estilo industrial en decoración. Sea cual sea el motivo, esta pulsera es una pasada y su realización es todo lo fácil que es el macramé. En principio cualquiera puede hacerlo, con un poco de constancia, dedicación y sobre todo repetición. La repetición de una labor manual es el mejor maestro que existe. Estoy convencido que la primera pulsera te puede costar un poco, pero seguro que cuando lleves una docena ya lo haces con los ojos cerrados.

Bonita pulsera realizada con hilo y tuercas de latón. Un look atrevido inspirado en el estilo industrial, para chicas fuertes y sin complejos. El color crudo del cordón va muy bien con el latón de las tuercas pero podéis elegir el hilo que prefiráis.

El material es sencillo y barato. Usaremos:

• Hilo, el que queramos, lana, algodón…
• Tuercas de latón hexagonales.
• Cinta adhesiva.
• Sellador acrílico o laca de uñas.

El latón tiene una extraña tendencia a oscurecerse por oxidación, será conveniente darle a las tuercas un pequeño baño con algún sellador acrílico o simplemente con laca de uñas transparente. Quedarán protegidas y además no nos mancharán la piel.

En primer lugar aquí tenéis un instructivo esquema de cómo tejer esta pulsera de macramé con nudo cuadrado. Se han usado dos colores para que resulte más fácil de seguir la ilustración. Cogemos dos trozos de hilo de 120 cm. y los doblamos por la mitad, hacemos un nudo como vemos y tenemos los ojales de la pulsera. Fijamos en la mesa con cinta adhesiva y comenzamos a anudar tal como se ve en la figura dos.

Seguimos anudando como se ve en la figura tres hasta que completemos ocho nudos cuadrados, entonces insertaremos una tuerca, a continuación otro nudo cuadrado y otra tuerca. Así hasta haber insertado las nueve tuercas de latón y acabaremos simétricamente con otros ocho nudos cuadrados. Anudamos y cortamos los extremos si resultan demasiado largos.

Hemos terminado nuestra pulsera, seguro que no será la única que hagamos. ¡Nos lloverán las peticiones!

Vía: minieco