¿Quieren que sus hijos lleven ropa molona y con un toque personal? Pues entonces pueden probar con esta idea! Verán como en minutos podrán customizar a gusto de forma fácil y con un resultado espectacular… Y como ya pueden imaginarse es esa dulce idea del mes que siempre me gusta presentarles… la que he preparado para la Revista Crecer Feliz!!! A qué mamá y a qué papá no le gusta que su hijo vaya guapísimo y a la última? Hoy en día es más fácil conseguirlo, porque la oferta de estilos y marcas es súper amplia. Sin embargo, hay muchas ocasiones en las que no encontramos lo que necesitamos o lo que habíamos pensado. ¿La solución en estos casos? Comprar prendas básicas de muy buena calidad y personalizarlas nosotros mismos. Podemos hacer nuestros propios diseños o utilizar patrones clásicos, el resultado será el mismo en los dos casos: ropa para el bebé con ese sello personal que sólo se consigue con el amor de mamá y papá. ¿A que es una idea atractiva? Lo bueno es que además es fácil de hacer… ¡y muy económica!
Necesitamos:
- Ropita de bebé.
- Pinturas específicas para pintar tela en distintos colores.
- Lápices con goma de borrar.
- Alfileres.
- Cartón fino.
- Cúter y base para corte.
- Papel de calcar o manteca.
- Patrón estrella y corazón.
Cuando compren las pinturas para tela armen bonitas combinaciones de colores y no olviden lavar las prendas antes de trabajar sobre ellas. Empecemos…
Preparemos el diseño: podemos buscar un patrón en internet o crearlo nosotros mismos. También les he dejado uno que hice yo en los materiales por si quieren aprovecharlo. Pueden ser estrellas, corazones, nubes, flores o cualquier otro diseño que quieras pintar en la ropita de tu bebé. Lo imprimimos y lo transferimos al papel de calcar o, si no tienen, pueden reemplazarlo por papel manteca (el que usamos en la cocina para algunas recetas). A continuación cortamos el diseño por el contorno con ayuda del cúter y sobre la base de corte.
Colocamos el patrón: una vez que tenemos la forma cortada, la fijamos a la prenda del bebé que vamos a decorar con ayuda de unos alfileres. Además, colocamos el trozo de cartón por debajo de la tela, dentro de la prenda, para evitar que la pintura pase de un lado a otro. Por último, preparamos las pinturas y los lápices para estampar.
Vamos a pintar: comienza la etapa más divertida de este proyecto: decorar la prenda. Podemos hacerlo con un sólo color, pero queda más bonito si combinamos varios. La idea es ir estampando poco a poco con la goma de los lápices, usando uno por cada color de pintura que tengamos. No hay que olvidar limpiar la goma del lápiz a medida que avanzamos.
Para completar: seguimos estampando con los distintos colores hasta completar toda la superficie del diseño. Una vez que esté listo, lo dejamos secar el tiempo que indique el fabricante del producto en el envase (esto es esencial para evitar que la pintura se estropee). Luego, sólo tendremos que quitar con cuidado el papel que usamos como patrón…¡y listo!
Idea lista para que los más pequeños la luzcan en su próxima salida! Es una propuesta que pueden hacer tanto con la ropa de verano como la de invierno.