Tener un banco de trabajo en el jardín te facilitará enormemente el trabajo de mantenimiento habitual con las macetas. Puedes colocarlas a una altura cómoda para trabajar con ellas y si además puedes tener tus herramientas, semillas, útiles y demás objetos relacionados con la jardinería bien ordenados en un armario pues mucho mejor. Para este fin os mostramos esta fantástica transformación a partir de una vieja alacena de cocina.
Además os quedará estupenda como elemento decorativo en el patio o jardín. Podéis darle el acabado que prefiráis pues todos los elementos ornamentales los escogeréis vosotros mismos.
Material:
- Una vieja alacena
- Papel de lija o lijadora eléctrica
- Masilla para madera
- Pegamento
- Contrachapado marino o similar
- Imprimación para exterior
- Pintura para exterior
- Tela metálica
- Grapadora
- Mosaico
- Cola para azulejos
- Cemento blanco para rejuntar
- Esponja
- Llana de goma
- Moldura de madera de unos 2 cm de anchura
Comenzaremos desmontando las puertas y los herrajes del mueble. Masillaremos los orificios que queden a la vista y lijaremos todo el mueble para tener una buena base de trabajo, a continuación aplicamos la imprimación y pintamos todo el mueble. Cortaremos el contrachapado o lo habremos mandado cortar a la medida de la encimera del mueble. Es importante que sea un contrachapado que soporte la humedad pues el mueble seguramente quedará en el exterior.
Pegamos el tablero y rematamos el contorno con la moldura de madera. Aplicamos cola para azulejos en la superficie de la madera y pegamos el mosaico tipo gresite.
Cuando haya secado la cola prepararemos una lechada de cemento blanco que aplicaremos con una llana de goma. Repasaremos después con una esponja humedecida para retirar el sobrante y acabar el rejuntado.
Ahora podemos ir montando los herrajes y tiradores elegidos. Y distribuyendo cada espacio para el cometido que queramos.
Instalaremos colgadores en el interior de las puertas y en los huecos que los precisen para tener nuestras herramientas de jardinería bien ordenadas.
Podemos sustituir el frontal de alguna puerta por tela metálica, resulta muy decorativo pues le da rusticidad al mueble, además será muy práctico para almacenar productos u objetos que precisen ventilación.
El recubrimiento de gresite nos permitirá trabajar cómodamente sin miedo a ensuciar o mojar la madera. Y por supuesto resulta muy fácil de limpiar simplemente con una bayeta húmeda.
Incluso podemos tener la manguera cerca, colgada en un gancho en el lado del mueble. Lo cual es una gran ventaja cuando estemos realizando tareas de siembra o transplante.
Vía: bhg.com