Cómo hacer tintes caseros con frutas y hortalizas

Si te gusta personalizar tu ropa o accesorios textiles con nuevos colores tienes que echarle un vistazo a esta idea que traemos hoy. Se trata de usar los desechos vegetales típicos del hogar para obtener tintes naturales y 100% respetuosos con el medio ambiente. Los resultados son por supuesto más livianos que los obtenidos con colorantes industriales pero desde luego son más sanos, ecológicos e incomparablemente más económicos.

Ingredientes de los que puedes obtener soluciones colorantes:

• Pieles de remolacha
• Pieles de cebolla
• Hojas de col lombarda
• Espinacas
• Cáscaras de naranja
• Cazos pequeños

Cuando prepares alguna de tus comidas debes guardar las partes que normalmente sueles desechar para este menester. Bien para comenzar la tarea necesitarás al menos una taza de cada uno de estos restos bien picaditos. Con arándanos, moras y col lombarda se pueden conseguir azules y púrpuras preciosos. Frambuesas y remolacha te darán tinte rojo. Las cáscaras de naranja y limón dan un color amarillo claro u ocre. Las espinacas dan un verde estupendo y con las pieles de cebolla cocidas a fuego lento obendrás un bonito color naranja. Y por supuesto puedes experimentar con el vegetal que quieras, no cuesta nada.

Colocar una taza de cada vegetal picado en una cacerola, añadir doble cantidad de agua y poner al fuego primero a fuego medio y cuando comience a hervir bajarlo a fuego lento. Dejaremos cociendo durante una hora aproximadamente. Transcurrido ese tiempo apagaremos el fuego y dejaremos enfriar.

Cuando hayan enfriado vertemos cada tinte en un tarro de cristal. Para usar nuestros tintes hemos de dar un tratamiento fijador a la prenda que queremos teñir. Si vamos a usar tinte hecho con frutas colocaremos la prenda en un recipiente al fuego con 1/4 de taza de sal y 4 tazas de agua. Si en cambio vamos a usar tintes hechos con verduras y hortalizas haremos el tratamiento con 1 taza de vinagre y 4 tazas de agua. En ambos casos debemos tener la prenda en la mezcla y al fuego, lento por supuesto, durante una hora. Enjuagamos la prenda con agua fría y la dejamos en el baño de tinte hasta que alcance el color deseado.

Vía: Popsugar.com