Una idea muy original para transformar de una forma fácil y sencilla cualquier lámpara de sobremesa que nos tenga ya un poco hartas. Fastidia tirar algo que funciona y la verdad es que las lámparas son de esos objetos que suelen durar bastante, lo que no dura tanto es nuestra paciencia, podemos acabar odiándolas. Bien, si tienes alguna lámpara que se encuentre ya en ese punto o cerca, te traemos esta decoración que la transformará por completo.
Y de paso te librarás de un montón de pulseras, sí esas que tienes guardadas y ya no te pones hace una eternidad o más.
Materiales:
- Una lámpara de sobremesa
- Pulseras y brazaletes diversos
- Pegamento fuerte
- Imprimación
- Pintura
Proceso sencillo a rabiar. Desmontamos la lámpara quitando la pantalla y la bombilla. Dejamos el pie libre y vamos añadiendo pegamento a los brazaletes e insertamos estos en el eje de la lámpara. Usaremos un pegamento fuerte y si puede rellenar los huecos mejor que mejor.
Una vez colocadas todas las pulseras y brazaletes, hasta que cubran el eje vertical de la lámpara de mesa, dejaremos que seque bien el pegamento. Para ello lo mejor es seguir las instrucciones del fabricante y no dejarnos guiar por nuestras intuiciones o experiencias pasadas con otros pegamentos. A continuación podemos proceder a dar una capa de imprimación a las pulseras, podemos dejar alguna con su color original para crear un bonito efecto contrastante, y cuando seque la imprimación darle una mano de pintura del color que nos guste. Si vamos a dejar una pulsera sin pintar necesitaremos un poco de cinta adhesiva de pintor para recubrirla.
Vía: Bhg.com