Los aficionados a las manualidades sueñan siempre con tener una habitación en exclusiva para dedicarla a su pasión. No siempre puede ello ser posible pero sí hallar un hueco en cualquier habitación para disponer una mesa, una silla y un pequeño mueble que nos permita tener a mano todo el material que solemos usar.
Montar una pequeña cómoda con un gran número de cajones de reducido tamaño será un complemento indispensable para cualquier aficionado a las manualiadades y demás actividades DIY hoy tan de moda.
Materiales:
- Módulos de cajones sin tratar
- Pintura o barniz que prefiramos
- Pincel
- Ruedas
Estos módulos podemos encontrarlos en distintos comercios dedicados al bricolaje. No suelen ser muy caros y solo necesitarán un poquito de trabajo para su montaje. Lijar ligeramente toda la madera y a continuación pintar el módulo. Como veréis se ha pintado el frente de los cajones en un tono rosado y el resto se ha dejado del mismo color con un barniz transparente. Caben mil y un acabados, la imaginación de cada uno será el límite.
Uniremos dos o más módulos para conseguir el tamaño que precisemos. Las uniones pueden realizarse con fijaciones metálicas en los laterales y la parte trasera. También podemos darles un acabado elegante al interior de los cajones con pintura o forrándolos con tela o papel decorado. A continuación colocaremos las ruedas giratorias que nos permitirán desplazar con facilidad esta pequeña cómoda especializada. Un mueble sencillo de crear, que no ocupará apenas espacio y que nos resolverá el eterno problema de tener los pequeños objetos, herramientas y materiales que usamos para nuestros trabajos.
Vía: design-remont.info