Con cantos rodados podemos hacer fantásticas creaciones de bisutería y para ello no necesitamos ni una gran inversión ni herramientas muy complejas. Con poder taladrar y engarzar las piedras con los complementos habituales que usamos en bisutería tendremos unas magníficas piezas de aspecto natural y aire étnico.
La materia prima la tenemos ahí, en la Naturaleza, al alcance de nuestra mano. Seguro que tenemos cerca un río o una playa con cientos de miles de cantos rodados a nuestra disposición. La Gran Madre Naturaleza no se molestará si le cogemos unos pocos. Y sino siempre podemos encontrar cantos rodados en centros de jardinería y de materiales de construcción.
Materiales y herramientas:
- Cantos rodados o piedras
- Taladro de columna o multiherramienta tipo Dremel
- Broca de diamante de 2.5 mm
- Alicates de mordaza
- Un recipiente metálico
- Agua
- Gafas de seguridad
- Las fornituras y demás accesorios de bisutería que precisemos
Escogeremos piedras bien redondeadas y lisas, que no tengan cantos afilados o aristas. Las piedras redondeadas suelen ser de origen sedimentario, arenisca, caliza, etc.. Si cuentan con filos y aristas puede ser indicativo de su origen metamórfico o volcánico y estas piedras son mucho más difíciles de taladrar, se suelen romper o nos pueden romper la broca. En el recipiente bajo el taladro colocaremos la piedra a perforar bien sujeta con los alicates de mordaza. Nos pondremos las gafas de seguridad, verteremos un poco de agua sobre el canto rodado y comenzaremos a trabajar con el taladro.
Hay que mantener la piedra mojada vertiendo regularmente un chorrito de agua para que no se recaliente la broca. Para piedras pequeñas nos bastará con la broca de 2.5 mm aproximadamente. En cambio si queremos hacer orificios más grandes podemos usar una broca mayor.
Después sólo tendremos que usar los accesorios y fornituras necesarios para las composiciones que deseemos hacer conn nuestros cantos rodados perforados.
Como veis se puede hacer de todo con estas piedras y el resultado es muy decorativo. Para el acabado final de la piedra podemos elegir distintas opciones, natural o brillante. Para el acabado natural no habrá que añadir nada a la piedra pero si queremos un acabado brillante podemos usar vaselina o aceite para niños y si queremos un acabado ultrabrillante barnizarlas con un barniz de poliuretano transparente o una resina.
Vía: liveinart.org
1 comentario
muy bueno