Para cualquier evento festivo o simplemente para decorar nuestra casa cuando nos apetezca, además perfumaremos el ambiente de nuestro hogar de una forma natural y económica. Preparar esta sencilla corona no te llevará mucho tiempo y desde luego su elaboración está al alcance de cualquiera.
El romero, Rosmarinus officinalis, es una planta originaria de la cuenca mediterránea que en la actualidad su cultivo está extendido por todo el mundo. Es una planta que ha acompañado a todas las civilizaciones nacidas alrededor del Mediterráneo y por tanto está cargada de gran simbolismo. En la antigua Grecia los estudiantes se colocaban en la cabeza coronas de romero para mejorar su memoria antes de los exámenes. Se le consideraba afrodisíaco y por ello estaba consagrado a la diosa del amor, Afrodita. En la Roma clásica se quemaba romero en los rituales de purificación del hogar.
Materiales:
- Romero
- Aro
- Hilo o gomas elásticas
- Alambre de floristería
- Cinta de tela
- Alicates
Hemos de formar peqeños ramilletes de tallos de romero, tres o cuatro serán suficientes, los unimos con hilo o una goma elástica por la base. Y los fijamos al aro con un trozo de alambre de floristería. Seguiremos atando ramilletes y uniéndolos al aro hasta cubrirlo por completo. Después le damos la vuelta a la corona y recubrimos también por la otra parte. Podemos hacer la corona tan grande y tupida como queramos, ello dependerá del diámetro del aro y de la cantidad de ramilletes de romero que queramos incorporar.
Tendremos esta corona natural y mágica para decorar cualquier celebración o reunión que celebremos en nuestro hogar. También desarrollar decoraciones de mesa basadas en esta sencilla y aromática corona.
Vía: theprettyblog.com