Este divertido y creativo experimento les encantará a los pequeños y sólo necesitas unos pocos productos que seguramente tenéis en tu despensa. Es realmente curioso e instructivo ver los bonitos efectos que se pueden crear con algo tan sencillo. Tenlo en cuenta para las próximas vacaciones escolares o para un fin de semana, tus hijos se divertirán mucho con esta experiencia.
Materiales:
- Leche entera (contenido graso 2 % o superior)
- Un plato llano
- Colorantes alimentarios
- Jabón lavavajillas líquido
Cubrimos el fondo del plato con una fina capa de leche y dejamos que tome la temperatura ambiente. A continuación le pedimos al pequeño artista que vierta unas gotas de colorante alimentario a su gusto. Cada color debe verterse con unos cinco segundos de diferencia para dar tiempo a que se fije en
Ahora hay que añadir unas gotas del lavavajillas líquido con mucho cuidado, lentamente y esperar un instante.
La grasa de la leche reaccionará con el jabón y los colores comenzarán a moverse formando curiosas y originales combinaciones.
El proceso se prolongará durante un buen rato, cuando pare podemos añadir unas gotas más de jabón en las zonas donde haya todavía mucho colorante del mismo color y el proceso continuará aunque más ralentizado.
Un efecto físico curioso y divertido que maravillará a los más pequeños y que podemos explicar a los más mayores. La explicación del fenómeno reside en la tensión superficial de la leche, el colorante no rompe dicha tensión pero el jabón al reaccionar con la grasa de la leche sí. El movimiento siempre se produce hacia los bordes del plato donde la tensión superficial de la leche seguirá siendo mayor que en el centro.
Vía: flutterflutter
2 comentarios
Me encantaron los. Trabajos!! Quiero más!!
buenisimo!!!!