Cuando ya tienes un mueble mucho tiempo llega el momento en que estás harto de verlo, siempre igual, monótono y aburrido. Es el momento de transformarlo de alguna manera para que destaque de nuevo y te ofrezca un nuevo atractivo. La pintura es el proceso de transformación más habitual pero en ocasiones no podemos o no nos apetece ponernos a pintar. Pero puedes obtener un efecto idéntico, de transformación, usando cinta washi.
Este taburete de cocina, un anónimo e invisible elemento que sólo tenía utilidad práctica para alcanzar los objetos almacenados en los armarios superiores de la cocina fue sometido a esta transformación con cinta washi.
Materiales:
- Cinta washi en el color y diseño preferidos.
- Tijeras.
- Herramientas adecuadas para desmontar el mueble si procede.
Limpiar el mueble a conciencia para facilitar el agarre de la cinta. Para ello usaremos los productos y útiles más adecuados según el material con el que esté fabricado el mueble que vayamos a modificar.
Comenzaremos envolviendo las patas, si las tiene, desde abajo. Recubriremos de forma envolvente con trozos de cinta, montaremos levemente las vueltas de cinta tanto en sentido horizontal como vertical. Con un paño repasaremos la superficie de la cinta para que se adhiera bien y no queden burbujas de aire. Si se trata como en este caso de un mueble con patas es mejor recubrir la parte inferior también para que no se note nada, luego colocaremos protectores de fieltro o caucho para que no se rompa la cinta que apoya en el suelo o dañe el suelo de alguna manera. Y también para evitar que resbale el mueble.
Una sencilla transformación que podemos llevar a cabo en cualquier rato libre que tengamos. Y sin ensuciar nada ni tener que tomar precauciones para no manchar, una solución limpia y rápida.
Vía: fellowfellow.com