Estoy convencido de que este trabajo os tocará la fibra más sensible, sobre todo a los que sois padres o madres. Transformar un viejo mueble de TV, horrible por cierto, en una estupenda y luminosa cocinilla para vuestras pequeñas o pequeños, es toda una declaración de amor. El resultado como podréis apreciar es increíble, parece mentira que de ese horroroso mueble pueda resultar esa simpática y preciosa cocina para jugar.
¿Qué? Sin palabras, a que sí, a mi en particular me encanta este trabajo, es realmente imaginativo y pienso que si fuera niño otra vez me encantaría jugar con esta fabulosa cocina.
Pero comencemos por el principio, si tenéis a mano un mueble de TV de este estilo o podéis conseguir uno, el proceso no es demasiado complicado, laborioso pero no difícil.
Materiales:
- Un viejo mueble TV.
- Lijadora.
- Pintura blanca.
- Paneles metacrilato o plexiglás oscuro y uno transparente.
- Tableros de DM.
- Tornillos.
- Sierra de calar.
- Taladro.
- Grifo.
- Lavabo encastrado de acero inoxidable.
Como siempre que transformamos un mueble de madera comenzaremos con un lijado a fondo, nos preparará la madera para el trabajo de pintura y además quitamos toda la suciedad incrustada. Desmontaremos las puertas y estantes para trabajar con mayor comodidad y eficacia.
Aplicamos una primera mano de pintura blanca al viejo mueble y comprobamos que tan sólo con esto ya comienza a tomar otro aspecto.
Recortamos con la sierra de calar el orificio para instalar el fregadero y el grifo. Comprobamos que queda correcto.
Pasamos al siguiente paso, quitar el fondo que presenta los típicos orificios para el paso de cables y lo sustituiremos por otro nuevo, en contrachapado o DM. Acabamos el pintado con una nueva mano. El microondas lo haremos con unos trozos de DM y lo fijaremos a la parte superior.
Pasamos a los detalles una vez tenemos todo pintado. Usaremos metacrilato oscuro para crear la puerta del microondas y del horno. Las puertas del frigo están hechas con tablero de DM, también la cocina. Colocamos unos mandos que puedan girar para darle más realismo y pintamos los fuegos o pegamos unos círculos de vinilo. La ventana está hecha con un marco de DM y un trozo de plexiglás con una fotografía detrás.
El interior del horno se ha pintado en negro para darle mayor realismo. En la puerta del frigo se han colocado unas rejillas para poder guardar los productos frescos que necesitará nuestra pequeña cocinera o cocinero. Un trabajo intenso pero gratificante, espero que os haya aportado buenas ideas para hacer felices a vuestros hijos.