Con este tutorial aprenderemos a hacer acuarelas nosotros mismos y con productos caseros, sabremos a ciencia cierta qué contienen las acuarelas con las que pintarán nuestros hijos. Es una actividad en la que podemos implicar a los pequeños pues los productos que usaremos son totalmente inocuos y además se divertirán un montón colaborando en la realización de sus propias pinturas.
De paso podremos empezar a interesarlos por las ciencias, la reacción química que se produce al mezclar algunos de los ingredientes de seguro que les encantará. Sentirán que sus pinturas son únicas pues las han hecho ellos con sus propias manos y desde luego así es.
Materiales:
- Bicarbonato sódico.
- Vinagre blanco.
- Jarabe de maíz.
- Fécula de maíz (maicena).
- Una jarra de cristal.
- Colorantes alimentarios.
- Una cubitera.
- Batidor.
- Palitos de madera.
Pondremos en la jarra de cristal una taza de bicarbonato sódico ( unos 237 ml) y le añadimos, poco a poco, 175 ml de vinagre. Hemos de hacer esta operación vertiendo el vinagre de a pocos pues el bicarbonato comenzará una reacción efervescente y se nos puede salir de la jarra. Esta parte será la favorita de los peques, se lo pasarán superbién viendo como se produce la efervescencia del bicarbonato.
En cuanto acabe la reacción efervescente batiremos con la varilla para que bicarbonato y vinagre se liguen bien. Y el bicarbonato se disuelva por completo en el vinagre.
Ahora echaremos dos cucharadas de jarabe de maíz y una taza de fécula de maíz. Volveremos a batir la mezcla con la varilla para que todos los elementos se disuelvan.
Verteremos la mezcla en la cubitera que hemos preparado a tal fin. Una cubitera corriente de plástico será ideal para esta misión.
Con un palito de madera mojado en el colorante alimentario añadiremos color a cada porción de nuestro preparado. Recordad que mezclando varios colores podéis conseguir otros distintos. Rojo y azul hacen el morado, amarillo y azul hacen el verde y rojo y amarillo hacen el naranja.
En cuanto tengamos lista nuestra paleta de colores la dejaremos en un lugar tranquilo, a salvo de los peques que estarán desesperados por meterle mano, para que se seque. Puede tardar desde una noche hasta 48 horas en secarse dependiendo de las condiciones de humedad y temperatura.
Y cuando se hayan secado las acuarelas caseras estarán listas para que nuestros pequeños artistas las prueben. Una bonita experiencia que les enseñará a nuestros hijos algo más que pintar y a nosotros nos dará la tranquilidad de conocer los ingredientes con los que trabajan nuestros hijos.
Vía: allparenting.com
6 comentarios
Hola!! dónde consigo el jarabe de maiz?
No deberías tener problema en conseguirlo en tiendas y mercados. Saludos!
felicidades muy práctico…..muchas gracias por compartir!!!
lo hize lo unico es que no tenia el jarabe de maiz gracias me tardo 2 dias en secar pero fue muy lindo el resultado lo hize con una vieja hielera de mi mama
Genial muchas gracias!! Espero poder usarlas para mis “pinceladas”
Woooow!!!
maravillosa manera de introducir a los niños en el mundo de las ciencias y el arte!!!