¿Hay algo más básico que las piedras? Desde luego que no. Es un material relativamente fácil de encontrar y, si sabemos aprovecharlo bien, podemos usarlo como elemento decorativo. En este caso, emplearemos un puñado de piedras para hacer un interesante sujetalibros con aire antiguo. ¿Qué, nos animamos?
Pues para hacer el sujetalibros con piedras, vas a necesitar:
- Piedras de todas las formas y tamaños (algunas de ellas con un lado plano).
- Pintura en spray o aerosol de color dorado.
- Palitos para la silicona caliente.
- Pegamento industrial, silicona fuerte, etc.
- Pan de oro.
- Caja de cartón.
- Pistola de silicona.
- Cepillo de dientes viejo y jabón.
El primer paso consiste en reunir las piedras y lavarlas con el cepillo de dientes y el jabón. Hay que dejar que se sequen del todo. Después hay que rociar las piedras con la pintura en spray. Tenemos que asegurarnos de que todos los lados y ángulos queden cubiertos. Siguiendo las instrucciones del fabricante, dejamos que se sequen.
En el siguiente paso, debemos escoger las piedras que tengan un lado plano para ir construyendo la base. También nos valen para hacer el lateral. Rebusca hasta servirte de tres que sean tu punto de partida. Utiliza el pegamento caliente o la silicona para juntarlas. Apóyate en un lado de la caja de cartón para ir construyendo el lateral del soporte. Recuerda poner piedras con un lado plano también en esa parte. Sigue empleando la silicona hasta que estés satisfecho con el resultado.
Es el turno de usar el pan de oro en algunas aristas de las piedras para reforzar el efecto dorado. Este acabado le dará un toque más profesional, incluso ayudará a disimular cualquier rastro de pegamento.
Y hala, ya lo tienes, listo para funcionar. ¿Te ha costado mucho?
Vía: DesingSponge