Vidrio grabado suena como una de esas cosas que requieren de equipos industriales, pero en realidad es muy fácil y divertido. Todo lo que necesitas es algo de cristal, ácido para grabar vidrio y algo con lo que hacer las plantillas.
El material necesario para realizar el grabado del jarrón es el siguiente:
- Un jarrón de cristal transparente.
- Ácido para grabar cristal.
- Un pincel.
- Un cúter.
- Cinta adhesiva de pintor.
- Cinta métrica.
Este es el detalle visual de los materiales que se necesitan para este trabajo:
Para empezar pegaremos la cinta adhesiva en forma de espiral sobre el florero. Utilice la cinta métrica para mantener las tiras de cinta adhesiva con una separación simétrica. A continuación pegaremos otras tiras de cinta en espiral pero en dirección contraria. En este punto tendremos formado un patrón de rombos.
El paso siguiente consiste en recortar la cinta adhesiva con el cúter para formar el patrón de chevron. Cortaremos los excesos de cinta adhesiva e iremos repasando con los dedos para que la cinta que ha de quedar sobre el jarrón tenga perfecto contacto con el cristal y no quede levantada en ningún punto.
Siguiendo las instrucciones del fabricante del ácido para grabado que esté usando, extienda una capa gruesa en la parte descubierta del vidrio. Asegúrese de crear una capa lo suficientemente gruesa de ácido para que no se puede ver a través de ella. Si no es lo suficientemente gruesa no conseguirá un perfecto grabado. (Puede volver a grabar, pero es probable que tenga que quitar la cinta adhesiva mojada por el ácido y colocar otra nueva). Tras unos 60 segundos, o el tiempo recomendado por el fabricante, enjuague el vaso con agua fría. Una vez que haya aclarado todo el ácido de grabado ya puede retirar la cinta adhesiva.
Finalmente tendremos nuestro jarrón grabado al ácido dispuesto para recibir un bonito ramo de flores. Un consejo de seguridad, cuando trabajemos con el ácido de grabado hemos de seguir las instrucciones de seguridad que nos indique el fabricante, guantes y gafas de seguridad para evitar que alguna salpicadura nos produzca una lesión ocular. ¡Estamos trabajando con ácido corrosivo!
Vía: transientexpression