A nuestra casa llegan infinidad de envases que una vez consumido su contenido acaban en el contenedor de reciclados. Pero podemos darles un nuevo uso con un poco de imaginación y buen gusto. En esta ocasión os traemos una propuesta muy elegante para convertir unos envases de salsa para pasta en preciosos botes de cocina.
Los botes de cocina se pueden conseguir en multitud de tiendas, pero es difícil encontrar lo que necesitas cuando lo buscas, al menos a mí me ocurre con gran frecuencia. En cambio muchas veces al acabar de consumir algún producto envasado, sobre todo en recipiente de cristal, te quedas con la sensación de que es un desperdicio desechar algo tan bien hecho.
En la imagen superior podemos apreciar el antes y el después de esta transformación. Para llevarla a cabo sólo necesitamos de unos pocos y sencillos materiales:
- Pintura en spray.
- Botes o frascos.
- Cinta de tela.
- Pistola de pegamento.
- Papel de manualidades.
- Flores pequeñas u otros adornos.
El procedimiento es muy sencillo, limpiamos los botes, los sumergimos en agua caliente para quitar las etiquetas. Si nos queda algún resto de pegamento frotamos con un estropajo para quitarlo. Pintamos las tapas de los botes por el exterior con pintura en spray. A continuación cortamos la cinta de tela con la longitud suficiente para rodear el tarro y la pegamos con la pistola de pegamento caliente. Añadimos unas etiquetas que previamente habremos hecho con papel de manualidades, cartulina u otro tipo de soporte que nos guste. Podemos decorar las etiquetas con flores u otros pequeños detalles. Las etiquetas podemos imprimirlas o escribirlas a mano, como queramos. En los envases, sobre todo de salsas a base de tomate, suele quedar un cierto olor incluso después de lavarlos y enjuagarlos bien. Un pequeño truco es colocarles dentro, una vez limpios y secos, papel de periódico y dejarlo unos días. ¡Veréis como funciona!
Vía: thriftyandchic