Aunque no vivas en Edimburgo, que es la capital de los fantasmas por excelencia, o tu casa no sea una de esas norteamericanas encantadas, puedes tener presencias fantasmagóricas. ¿Cómo? Muy sencillo. Sigue nuestras instrucciones para prepararte para este Halloween. Spooky!
Para que tu espejo luzca con un fantasma vas a necesitar:
- Un espejo grande (obviamente), puede ser el de tu recibidor.
- Película decorativa para cristales.
- Cúter.
- Patrón o alguna idea en la que basarte.
Hacer este trabajo no requiere de demasiado tiempo, pero sí de ser muy hábil con el cúter. El diseño del fantasma a hacer puedes buscarlo en internet, hacer uno tu misma o dejar que tus pequeños preparen sus propios diseños. Es sólo una silueta lo que necesitas. Puede ser más terrorífico o más simpático, eso depende de tu gusto y del estilo decorativo que busques para halloween.
En cualquiera de los casos, puedes marcar con el lápiz el contorno de la figura y luego comenzar a cortar con el cúter la silueta, ojos, boca y demás que desees hacer. Una vez que tienes el diseño listo sólo resta pegarlo al espejo. Ten en cuenta ayudarte con una regla o un trapo para evitar que queden burbujas de aire al pegarlo.
La parte buena es que Halloween da la bienvenida a los desperfectos. Si queda esperpéntico, ¡será más auténtico!
Vía: Country Living