Los mapas viejos son muy decorativos y tienen una gran carga sentimental. ¿Quién no siente la añoranza de la infancia perdida al ver uno de estos mapa?. Las aulas que habitábamos en nuestra niñez siempre tenían un mapa colgado en la pared o sobre la pizarra. ¿Y porqué no usar algún mapa viejo o su reproducción para decorar un brazalete?
Para este proyecto se precisan los siguientes materiales:
- Mapa viejo o una reproducción.
- Brazalete de madera, se venden en tiendas de manualidades.
- Tijeras.
- Cepillo de espuma.
- Cola.
- Regla.
- Recubrimiento protector transparente.
Cortaremos el mapa en tiras estrechas de una longitud superior al ancho del brazalete. Los trozos han de rodear el brazalete también por su parte interior.
Aplicaremos cola en el brazalete y en las tiras de mapa e iremos pegándolas, como se ve en la imagen superior, de manera que se solapen las juntas. Procuraremos que queden bien alineadas, o sea queden perfectamente perpendiculares al brazalete. En esta etapa sólo pegaremos las tiras sobre la cara exterior del brazalete.
A continuación pegaremos los extremos de las tiras del mapa por la cara interior del brazalete. Con el sistema de tiras conseguimos lo que sería imposible si pretendiéramos pegar trozos grandes, evitar las arrugas y el alineamiento del mapa sobre la superficie redonda del brazalete.
Una vez pegados los extremos de las tiras de mapa por el interior del brazalete, podemos rematar esa zona con un mensaje o una inscripción.
Actuaremos igual que con el mapa, en pequeños trozos para evitar arrugas y deformidades. La inscripción puede ser la que queramos, desde una lista de deseos hasta una declaración de amor.
Finalmente le aplicaremos un recubrimiento protector para que el mapa no se desintegre entre nuestras manos, más bien en nuestra muñeca. Podemos usar cola de decoupage, sellador acrílico o cualquier otro producto similar. Con una resina transparente quedaría espectacular.
Vía: craftstylish