Elaborar bisutería es una actividad muy reconfortante, ver cómo con tus propias manos creas pequeñas cosas que pueden alegrar la vida, aunque tan solo sea un momento, a los demás. Sólo son unos sencillos pendientes de aro, nada sofisticados pero muy elegantes y tremendamente fáciles de hacer. Es una buena idea para hacer regalos para celebraciones.
Estos pendientes de aro tan elegantes requieren muy poca inversión en materiales, sólo necesitamos:
- Alambre de memoria para bisutería, los hay en diversas medidas y colores.
- Semillas de bisutería de varios colores.
- Alicates de punta fina.
Introducimos las semillas en el alambre, quizás la forma más fácil sea echarse unas semillas en la palma de una mano y con el alambre en la otra ir “pinchando” las semillas como si fueran guisantes, también se puede hacer esta operación con unas pinzas e ir ensartando una por una cada semilla en el alambre, aunque seguramente será más laborioso y complicado.
Una vez tengamos las semillas colocadas, doblamos con los alicates un extremo del alambre en un ángulo de 90º, tened cuidado que el ángulo no sea menor pues entonces molestará en el lóbulo de la oreja. En el otro extremo del alambre hacemos, también con los alicates, un gancho para cerrar el aro. Podemos suavizar los extremos del alambre con un buril para que no pinchen. Si este sistema no nos convence podemos colocar un par de ganchos para pendientes, no son caros y seguramente será más cómodo el uso de los pendientes.
Podemos hacerlos de un solo color como en la imagen superior o de varios, a nuestro antojo. Como podéis ver quedan unos aros sencillos pero vistosos.
Vía: howabout