Este sencillo proyecto podemos realizarlo a partir de múltiples muebles, desde una vieja mesa que deseemos restaurar hasta una mesita o estantería que compremos en kit para montar. Sea cual sea el mueble elegido el resultado será muy satisfactorio y decorativo. Seguro que atraerá las miradas de todos los que visiten vuestro hogar….
Bien, tenemos el mueble que queremos decorar al estilo de este proyecto ¿qué materiales necesitaremos? los siguientes:
- Pincel, rodillo…
- Papel de lija.
- Decapante.
- Imprimación y pinturas acrílicas.
- Cinta adhesiva “de pintor”.
El primer paso, si se trata de un mueble viejo, será quitar todos los restos de pintura, grasa, suciedad que pudiera tener. Para ello usaremos el decapante, aceite mineral o cualquier producto similar. Después lijaremos minuciosamente con lija fina de 180.
En el segundo paso aplicaremos la imprimación, dos manos, dejando secar muy bien entre una y otra. En cuanto tengamos las capas de la imprimación bien secas procederemos a pintar el color de fondo, podemos hacerlo con el color que prefiramos o varios colores. Este no es un proyecto en absoluto cerrado, la elección de color que se ha hecho aquí es simplemente una muestra. Sed imaginativos y lanzaos al mundo del color.
Ya tenemos el color de fondo perfectamente seco, ahora procedemos a trazar el diseño que queremos plasmar en otro u otros colores mediante tiras de cinta adhesiva. Usaremos cinta “de pintor” y a ser posible de buena calidad, para que cuando la despeguemos no nos llevemos pintura detrás y queden las franjas perfectamente delimitadas.
Tras estos sencillos pasos y un poco de esfuerzo por nuestra parte nos encontraremos en posesión de este bonito, decorativo y económico mueble, listo para ser instalado en el rincón de nuestra casa que prefiramos.
Vía: Freshome