En lugar de gastar dinero en comprar flores artificiales, puedes hacerlas tu misma, y cambiarlas cuando se pongan feas o se ensucien demasiado.
- Papel fino de colores, en este caso verde.
- Papel crepé de color verde oscuro.
- Cola de pegar.
- Tijeras.
- Alambre fino.
- Cinta adhesiva de doble contacto.
Cortamos tantas tiras como flores deseemos hacer. Podemos cortar de diferentes tamaños y así obtendremos flores de diversos tamaños a asu vez.
Una vez que tenemos las tiras, debemos comenzar a cortar pequeños flecos con la tijera. Mientras más finos, más bonita se verá nuestra flor. Al hacer este paso, debemos dejar un centímetro de la altura sin cortar ya que allí pegaremos la cinta adhesiva para luego poder formar la flor.
Por otro lado, cortamos un trozo de alambre fino sobre el cuál enrollaremos la flor. Colocamos la cinta de doble contacto y comenzamos a enrrollar la tira de papel sobre el alambre. Es bueno buscar una cinta adhesiva fina. Si no consiguen, es mejor que utilicen pegamento para que no nos queda una base de la flor muy grande.
Al terminar de enrollar, podemos colocar un pequeño trozo de cinta para darle una mejor terminación y así podremos comenzar a cubrir la base y el alambre con el papel crepé de color verde y terminar de darle forma al tallo de las flores.